viernes, julio 26, 2019

Los aromas de la memoria

Milenios sin escribir. O escribiendo, ¿pero qué?

Hoy me levanté pensando en lo hermoso que sería poder atesorar fragancias en pequeños frasquitos, esas que nos hacen navegar en las aguas de la memoria y que nos llevan a momentos, personas o lugares.

También puede ser peligroso. Eso aroma que evoca un amor, una traición, un momento feliz, un momento doloroso, podría hacer que nos anclemos allí y no sepamos regresar.

En definitiva, ¿será cuestión de azar que no podamos hacerlo o más bien de supervivencia? ¿Será, tal vez, mejor no recordar aquellas cosas que nos hacen pensar en nuestras elecciones?

Quizá, es solo el destino que nos ata a este presente y nos lleva hacia el futuro, como un barco con rumbo certero, que sabe hacia donde ir, incluso si su capitán no lo sabe. O podemos ser nosotres mismes quienes decidimos simplemente no recordar, no traer esa fragancia a nuestros días para que no sumerja nuestro frágil presente. No lo sé. Hoy solo puedo preguntármelo.

miércoles, enero 23, 2013

Buscar un amor sin artificio no es tarea sencilla. Sobre todo cuando nos preguntamos que es sin artificio, si las relaciones existen sin artificio... y no puedo encontrar esa respuesta, o si y no la quiero ver.
Entonces, puede que encontremos un amor casi sin artificio, un amor que nos acompañe... un amor.
Y, ¿para qué lo buscamos, o mejor, para qué lo encontramos? ahí es donde encuentro la mayor encrucijada. Pienso que para no estar solos, solos frente a qué, para qué. Tal vez sólo sea que conocemos a alguien que nos gusta, pasamos buenos momentos juntos, compartimos historias y sabemos, en general, que nos esperan cuando llegamos a casa, cansados de andar, de la vida (a veces), de la rutina... y sentimos algún abrazo reparador que, en este momento de nuestras vidas, es sólo esa persona quien sabe darnoslo.
Eso, por ahora, porque me llaman.

miércoles, junio 01, 2011

hola

martes, abril 12, 2011

Efímero, fugaz y frágil

Así es nuestro paso,
aunque nos cueste entender.
Caminamos y no conocemos ese momento.
Hasta que descrubrimos,
por tu ausencia,
todo lo que significa no estar más.
Te espero,
te sueño y te extraño.
No se si nos vamos a ver,
hiciste frágil mis creencias.
Quiero creer que si.
Te pensamos siempre,
te queremos siempre.

lunes, enero 18, 2010

No le voy a dedica un sólo papel más. Cuando esta lejos no lo pienso, no lo siento; pero lo escucho y se me cae el mundo, se desarma. Se rompe.
Ayer te ví y sólo pensé en que eras un hijo de puta.
Hoy ya no.
No se para qué te llamé.
Y se que hoy no me vas a llamr, y yo voy a estar, como siempre, esperándote. Como si no lo supiera! Como si no pasara siempre!
Y cuando llegue tu mensaje me voy a deasrmar, voy a ser un rompecabezas que va a llegar a tu casa a que lo armen, a que lo amen. Y me voy a reir y voy a dormir y me voy a ir.
Y cuando vaya, esta vez, voy a tener que irme para siempre, no me pidas nada esta vez, nada lo que pienses que vos no vas a hacer.
No te mudes cerca mio.
Dejame de una vez
Dejame que te deje
Dejemos dejarnos.
Me duele, pero más me duele todo esto.
Ni una lágrima de sal más derramada
Ni una lágrima de sangre más
Ni mas bronca
Olvido.

jueves, noviembre 26, 2009

Vomitar palabras.

Escupir sentimientos.
Racionalizar acciones.
Entender.
Aguantar los golpes.
Soportar tus palabras, tus ausencias, tus silencios.
Entender por qué hoy nos paramos así, por qué todavía no te vas.
Las mezclas de sentimientos ahogan mis palabras, conforman mis silencios
Tengo que volverte a ver...
Te espero siempre,
estoy en busca de algo...

viernes, abril 25, 2008

Entre la última vez que escribí y esta pasaron....
Los instantes de suspención en la cotidaneidad son miles... Cada segundo, cada minuto de parálisis implica un segundo de existencia. La existencia no es simpre, no es ahora.... es cuando la sentimos, es cuando nos damos cuenta que estamos vivos, es una caricia, un golpe, un abrazo, la ternura. ¿cuántas veces lo sentimos? ¿cuántas veces no somos un autómata más en la ciudad, lleno de humo y dolor? ¿cuántas veces abandonamos y cuántas nos abandonan?
Difícil. ¿Qué nos hace seguir? hoy me pregunto eso, una y mil veces. Qué me hace seguir acá, respirando, comiendo, amando.... es el amor? el dolor? la incertidumbre? el orgullo?
qué es?
Es lo que nos imponen, es lo que nos piden, es un sistema, es una vida, es la coerción. Es el dolor.
El dolor constante, la rutina, de lo que nos agobiamos pero no abandonamos, de los huevos que nos faltan, de no ser libres realmente.